“Daniel Villa dejó un legado en nuestros corazones”
La Asociación de Trabajadoras y Trabajadores de la Universidad Nacional de Luján ofreció este martes en su sede un sentido acto de agradecimiento a Daniel Villa, miembro fundador del sindicato, quien falleció el jueves.
Con la presencia de las autoridades de la Federación FATUN, de cuyo desarrollo fue una pieza fundamental; de la UNLu; de ATUNLu; y de familiares directos de Villa, el encuentro contó con el calor de cientos de Nodocentes, que expresaron su reconocimiento al histórico dirigente.
“Generoso” y “apasionado” fueron algunos de los adjetivos con los que intentaron definirlo quienes hicieron uso de la palabra, entre ellos el secretario general de FATUN, Walter Merkis; el rector Walter Panessi; y el secretario general de ATUNLu, Juan Ramos.
“Para mí fue un gran amigo”, dijo Merkis visiblemente emocionado y resaltó que “compartíamos nuestro amor por la justicia social y el peronismo”. “Somos justicialistas y esa es la fórmula que llevaremos adelante para siempre como él quería”, manifestó.
“Daniel tenía una muy buena forma de argumentar, era difícil estar en contra”, reconoció Panessi y señaló que el dirigente sindical mereció el reconocimiento de todo el sistema universitario. En su mensaje citó a Bertold Brecht: “Hay quienes luchan toda la vida, esos son los imprescindibles”.
“Se fue físicamente pero nos dejó un legado esculpido en piedra en nuestros corazones”,manifestó Ramos, quien destacó que la dedicación de Villa en la Secretaría de Capacitación de la FATUN permitió formar trabajadores políticamente activos.
Luego, con el micrófono abierto, muchas y muchos participantes del acto dieron testimonio de la trayectoria de Villa en sus diferentes facetas: como dirigente, formador, político y consecuente amigo de sus amigos.
Entre quienes se sumaron hubo representantes de diferentes organizaciones sindicales Nodocentes, algunos de los cuales subrayaron el esfuerzo de Villa por integrar al “interior profundo” de la Argentina. También fue muy alta la participación mediante la transmisión del acto vía Youtube.
En un mediodía lluvioso, el encuentro se cerró con el sonido de los infaltables bombos sindicales y el grito conjunto “Soy Nodocente, es un sentimiento, no puedo parar”. Por la tarde, en la Basílica Nacional de Luján se ofició una misa por el eterno descanso de su alma.
