ADUNLu repudió la autorización para el ingreso de tropas extranjeras en la Argentina: “un hecho de extrema gravedad institucional, política y simbólica”

  • Publicado el: Jue, 02/10/2025 - 13:53
La Asociación de Docentes de la Universidad Nacional de Luján (ADUNLu), junto a la Federación CONADU Histórica y la CTA Autónoma expresaron en un comunicado su repudio por la “reciente autorización presidencial para el ingreso de tropas estadounidenses al territorio argentino”, calificándolo como “un hecho de extrema gravedad institucional, política y simbólica”.
 
El comunicado fue dado a conocer este jueves 2 de octubre, y exige “una inmediata derogación del DNU 697/2025, la restitución del debate parlamentario sobre ingreso de tropas extranjeras, y una política de defensa nacional soberana, democrática y no alineada”.
 
El comunicado sindical completo afirma:
 
“La reciente autorización presidencial para el ingreso de tropas estadounidenses al territorio argentino, mediante el Decreto de Necesidad y Urgencia 697/2025, constituye un hecho de extrema gravedad institucional, política y simbólica. Bajo el pretexto de ejercicios militares conjuntos —denominados "Operación Tridente"— el gobierno de Javier Milei habilitó la presencia de fuerzas extranjeras en bases navales de Ushuaia, Mar del Plata y Puerto Belgrano, sin el aval del Congreso Nacional, como exige la Constitución, violando nuevamente el sistema democrático. El inciso 28 del artículo 75 de la Constitución Nacional establece que es facultad exclusiva del Congreso permitir la introducción de tropas extranjeras en el territorio de la Nación. Eludir este procedimiento mediante un DNU no solo vulnera el marco legal vigente, sino que profundiza la lógica de concentración autoritaria del poder ejecutivo.

Desde ADUNLu, denunciamos esta maniobra como una afrenta a la institucionalidad democrática y al principio de soberanía popular dando lugar a profundizar desde el Estado Nacional la geopolítica del sometimiento, ya que la presencia militar estadounidense en el extremo sur del continente no es inocente. Ushuaia, como enclave estratégico cercano a la Antártida y a las rutas marítimas del Atlántico Sur, representa un punto de interés geopolítico para Washington. La instalación temporal de tropas —aunque se niegue la creación de una base permanente— responde a una lógica de subordinación militar y alineamiento con los intereses del Comando Sur de EE.UU., que ya ha manifestado su preocupación por "organizaciones criminales transnacionales" en la región.

Esta decisión no puede desvincularse del contexto de endeudamiento externo y subordinación financiera que atraviesa el país. La autorización del ingreso de tropas extranjeras se inscribe entre las concesiones impuestas por el gobierno de Estados Unidos como parte del acuerdo para el nuevo préstamo. Mientras se recortan presupuestos educativos, se desfinancia la ciencia y se precariza la salud pública, el gobierno destina más de 60 millones de pesos a ejercicios militares con fuerzas de elite extranjeras. Esta política de militarización no fortalece la defensa nacional: debilita el tejido social, promueve la lógica del enemigo interno y desplaza los debates urgentes sobre justicia social, redistribución y derechos humanos.

Denunciamos la militarización como forma de violencia estructural que refuerza el patriarcado, el extractivismo y la colonialidad. Las tropas extranjeras no solo representan una amenaza a la soberanía territorial, sino también a la soberanía de los cuerpos, los territorios y las comunidades. No olvidemos que nuestra historia latinoamericana está marcada por intervenciones militares que han dejado huellas de represión, saqueo y subordinación.

Exigimos una inmediata derogación del DNU 697/2025, la restitución del debate parlamentario sobre ingreso de tropas extranjeras, una política de defensa nacional soberana, democrática y no alineada”.