ADUNLu repudió la persecución y estigmatización de organizaciones sociales

La Asociación de Docentes de la Universidad Nacional de Luján (ADUNLu) emitió un comunicado por el que sostiene su repudio a “toda persecución y estigmatización a las organizaciones sociales”.
 
El comunicado afirma lo siguiente:
 
“La semana pasada se realización 27 allanamientos contra organizaciones piqueteras (Polo Obrero, Frente de Organizaciones en Lucha –FOL-, y Barrios de Pie, entre otras) ordenados por el Fiscal Gerardo Pollicita a raíz de la denuncia de la ministra Patricia Bullrich.
 
Estos allanamientos, que siguen un manual policial y persecutorio propio de la dictadura militar, tuvieron lugar en comedores comunitarios y en domicilios particulares de dirigentes sociales, en su gran mayoría ubicados en la Ciudad de Buenos Aires.
 
Las denuncias contra las organizaciones están armadas sobre la base de una enorme tergiversación donde se presenta a los movimientos sociales, y a sus dirigentes, como un grupo de extorsionadores. Esta hipótesis carece de sustento. Las organizaciones sociales no otorgan altas ni bajas de programas sociales y sus decisiones colectivas más relevantes se toman asambleas, como los hacemos -por ejemplo- en ADUNLu desde hace décadas.
 
Esta política represiva se suma a los intentos de establecer la "Reiterancia" en la Ciudad de Buenos Aires y en el país, para reforzar la criminalización de las luchas populares, y todas las medidas represivas que viene llevando adelante el gobierno nacional.
 
La aplicación de estos métodos persecutorios tiene un solo propósito: quebrar el movimiento de lucha que viene enfrentando -con movilizaciones, paros, asambleas, cortes, etc.- las políticas de ajuste del gobierno del presiente Milei. Un gobierno que en medio de una enorme crisis social ha retirado todo tipo de alimentos a los comedores populares, congeló y recortó los programas sociales y que lleva adelante un verdadero plan de hambre contra las mayorías populares.
 
A ello se suma que cuando las organizaciones llevan a cabo protestas legítimas se las reprime ferozmente, se los denuncia penalmente y en declaraciones públicas de funcionarios o en los medios de comunicación, se utilizan expresiones peyorativas como "planeros", "vagos" y hasta "delincuentes" o "corruptos". Algo parecido ocurrió con la docencia universitaria en el contexto de organización de la movilización del 23A, donde el gobierno nos acusó de ejercer "adoctrinamiento" en las aulas.
 
Señalamos que este tipo de discursos oficiales de odio, con intenciones claras de estigmatizar a quienes tienen algún tipo de relación con el Estado, sea en términos de ayuda social o dependencia laboral, ponen en juego el principio de inocencia, en la medida en que se invierte la carga de la prueba.
 
Por todo lo mencionado, queremos manifestar nuestro más enérgico repudio a las prácticas estigmatizantes que se vienen desplegando contra las organizaciones sociales, dirigidas no a identificar y corregir eventuales irregularidades, sino a desacreditar y deslegitimar la organización colectiva misma. Además, cabe consignar que varios equipos docentes de la UNLu trabajan cotidianamente en el territorio con organizaciones sociales compartiendo distintos proyectos de docencia, extensión e investigación.
 
Nuestra solidaridad con las y los compañeros perseguidos. Exigimos el cese de toda persecución política y nos sumamos a la exigencia para que se concreten los reclamos de las organizaciones sociales y del movimiento obrero en su conjunto.
 
¡Basta de perseguir luchadores populares!
 
Comisión Directiva de ADUNLu, 20 de mayo de 2024”.